La Plata, 13 de Junio de 2025 (La Plata News).- Más de un millón de personas en la provincia de Buenos Aires están potencialmente expuestas a agua contaminada con arsénico, una sustancia tóxica de origen natural que, en altas concentraciones y exposiciones prolongadas, puede provocar hidroarsenicismo crónico regional endémico (HACRE), además de diversos tipos de cáncer de piel, vejiga, pulmón y riñón.
Frente a esta situación crítica, investigadores de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y el CONICET pusieron en marcha un sistema de purificación de agua innovador, eficaz y de bajo costo que ya se implementa en la localidad de Pipinas, partido de Punta Indio.
Tecnología accesible para agua segura

El sistema fue desarrollado por equipos del Instituto de Investigaciones Fisicoquímicas Teóricas y Aplicadas (INIFTA) de la Facultad de Ciencias Exactas, y del Departamento de Hidráulica de la Facultad de Ingeniería de la UNLP. Se basa en el uso de hierro cero-valente (ZVI), una técnica que permite remover eficazmente el arsénico del agua subterránea.
Según el Dr. Fernando García Einschlag, coordinador del proyecto, el proceso consiste en la corrosión controlada del hierro, que genera compuestos capaces de adsorber y precipitar el arsénico, reduciendo sus niveles hasta cumplir con los estándares internacionales de potabilidad.
Cómo funciona la planta de tratamiento en Pipinas
La planta, inaugurada en 2022, tiene capacidad para tratar hasta 15.000 litros diarios de agua y se organiza en tres etapas principales:
- Reactor tubular con lana de hierro, donde el contacto con oxígeno disuelto genera especies químicas que comienzan a retener el arsénico.
- Tanque de oxidación y coprecipitación, que transforma el hierro y permite la adsorción del contaminante.
- Sistema de filtrado doble, que elimina las partículas generadas y entrega agua lista para el consumo humano.
Actualmente, la comunidad accede al agua purificada mediante una canilla pública, y se capacita al personal local para operar y mantener el sistema.
Impacto social y posibilidad de réplica

La iniciativa fue posible gracias al trabajo conjunto de universidades, Estado y la cooperativa local, con financiamiento de la Secretaría de Políticas Universitarias, el Ministerio de Ciencia y Tecnología, y otras instituciones.
El modelo desarrollado en Pipinas se plantea como una solución replicable para las regiones afectadas por arsénico en el agua en toda la llanura Chaco-Pampeana, incluyendo localidades del noroeste y centro oeste de la provincia de Buenos Aires y zonas próximas a la Bahía de Samborombón.
Además, el equipo de la UNLP explora adaptaciones futuras del sistema para la remoción de otros contaminantes presentes en fuentes de agua subterránea.
Ciencia y compromiso: un ejemplo de transferencia real
Este desarrollo de la UNLP y el CONICET no solo aporta una solución científica concreta a un problema estructural, sino que también fortalece el vínculo con las comunidades afectadas al formar, capacitar y acompañar a los actores locales en el uso de la tecnología.
Gracias al trabajo coordinado por el Dr. Fernando García Einschlag junto a un equipo interdisciplinario de investigadoras e ingenieras, el acceso al agua potable segura ya es una realidad para muchas familias de Pipinas, y un ejemplo esperanzador para otras regiones del país. (La Plata News)